Esquiada en Poiana Brasov
La nieve que ha caído en las últimas semanas ha mejorado las condiciones de esquí de las estaciones cercanas a Bucarest así que, aún temerosos por nuestro lamentable estado físico (¡vaya par de viejunos!), Alfredo y yo nos decidimos a pasar el sábado en Poiana Brasov, la estación más grande a menos de tres horas de la capital.
Poiana Brasov está a pocos kilómetros de la ciudad de Brasov, tiene 10 pistas de esquí y varios remontes que incluyen un telehuevo y un telecabina. Aunque a primera vista pueda parecer pequeña, hay que reconocer que es una estación muy bonita pues las pistas bajan entre árboles y las vistas sobre la llanura transilvana son simplemente espectaculares. También tiene un par de restaurantes donde uno puede recuperarse del frío con un vino caliente, un cascaval pane o un bocata servido por camareros.
La calidad de la nieve era estupenda, aunque el lamentable mantenimiento de las pistas – la máquina quitanieves estaba totalmente cubierta de nieve - hace que afloren las piedras y las clapas de hielo por doquier, lo que no hace fácil el esquí para los principiantes. Si a esto le sumas las cantidades ingentes de esquiadores que hay durante el fin de semana, el esquí se convierte en una actividad algo complicada, aunque la estación bien vale una visita.
Finalemente, vale la pena comentar el curioso sistema de forfait según el cual el esquiador debe comprar puntos ya que cada remonte tiene un precio distinto (3 puntos el telearrastre, 6 puntos el telecabina y 8 puntos el telehuevo). Un forfait de 60 puntos vale 120 RON (29 €) y el alquiler de los esquís 30 RON (7,3 €).
1 comentario
Gloria Jones -
Muchos bss.